Reflexión sobre partir
En la tarde demasiado serena
se precipitaron las despedidas:
agitarse de pañuelos;
manos amontonadas
que procuraban
ganar el espacio,
el tiempo y los ojos
de los viajeros.
Cintas de colores,
humedad de lágrimas.
Aunque el anciano afirmara
que toda separación es ilusoria,
las caravanas de aquellos que se marchan
las multitudes de quienes los despiden
llenan cauces, orillas,
pieles sedosas de siameses...
...en ese punto me miraste, hiciste un gesto
y pusiste tu pie descalzo en mi regazo.
Las despedidas cuelgan de nuestros ganglios:
bolsas invisibles,
pesadas
luego de recorrer milenios,
eternidades de mostaza,
universos de pomarrosa
y carne de gaviotas.
Hacia el atardecer cantaste:
nuevas melopeas de adioses,
nuevas orillas, nuevos cosmos
en ese regurgitar del cielo
que cubre tu danza
de gelatina azul,
de promesas de apriscos
y de sol.
De OBRA POÉTICA DE GOCHO VERSOLARI - Blog de poemas
GOCHO VERSOLARI